Sergio García, a sus 32 años, está volviendo a ser el de antaño, el gran jugador que le llevó a casi lo más alto de la clasificación mundial gracias a su juego creativo y ambicioso. Ahora el de Borriol se ha adjudicado el Iskandar Johor Open de Malasia tras firmar una impresionante tarjeta con 61 golpes en el tercer y último recorrido de un torneo que tuvo que ser reducido debido a las lluvias torrenciales.
Las fuertes tormentas en el sur de Malasia ya habían recortado hasta los 54 hoyos el campeonato del Circuito de Asia de final de temporada y un clima más adverso obligó a un nuevo retraso el domingo.
El castellonense, sin embargo, no dejó que eso le afectara, ya que jugó un gran golf terminando las tres rondas con un 18 bajo un par total de 198 y ganando por tres golpes al americano Jonathan Moore, que terminó el tercer recorrido con los mismos golpes que García.
Thongchai Jaidee cerró el podio con 65 golpes en el último recorrido llegando a un total de 202, cuatro más que Sergio García. El extremeño Javi Colomo terminó el torneo en la décimocuarta posición con un total de 209 golpes.
Este torneo era el último de la temporada del Asian Tour y estaba dotado con dos millones de dólares en premios.
El castellonense ha logrado en Malasia su segundo título individual de la temporada: en agosto ganó el Windham Championshiph en Greensboro, en Estados Unidos, y al mes siguiente su actuación fue decisiva en la histórica victoria del equipo europeo en la Ryder Cup, en Medinah.
“Me hace especial ilusión”, añadió, “dedicar esta victoria a mi sobrino y ahijado Erik, el hijo de mi hermana Mar y Pablo Hernández (futbolista castellonense que actualmente milita en la plantilla del Swansea City AFC”.
“Ha sido un torneo complicado y una semana muy larga”, continúo Sergio, “con muchas interrupciones que te hacen perder el ritmo y la concentración, pero he jugado muy bien, sólido y consistente, dejándome muchas oportunidades de birdie y han entrado los putts. La organización ha hecho un gran trabajo consiguiendo que hayamos podido jugar tres vueltas”.
“El principio de la temporada fue un poco frustrante, estaba dándole bien a la bola y, desafortunadamente, no se reflejaba en el resultado; tuve algunas semanas que fueron muy duras. Hoy, estoy feliz. La semana pasada fue decisiva en la victoria de hoy, que me ha dado mucha confianza”, dijo el castellonense.
“Ahora, a descansar cinco semanas, el año ha sido largo y necesito descansar. Quiero disfrutar de mi familia y amigos y, sobre todo, de mi sobrino”, concluyó.
