Tiger Woods está cada vez más cerca de volver a saborear las mieles del triunfo que tanto tiempo lleva sin degustar, nada menos que dos años. Sin embargo, la victoria le sigue rehuyendo. Esta vez se quedó muy cerca, a dos golpes del ganador en el Open de Australia, y, pese a su buena actuación, no pudo evitar la victoria del australiano Greg Chalmers, con 275 golpes.
Woods inició el último recorrido a seis golpes del líder, pero tres birdies en los nueve primeros hoyos hicieron que todo el mundo dirigiera sus miradas hacia el ex número uno del mundo. Un bogey en el hoyo 11 lo arregló de inmediato con otro birdie en el 12, mientras que en el 13 volvió a firmar otro bogey.
Un eagle hicieron que se reavivaran los focos sobre el juego de Woods, pero ahí acabó la racha para acabar firmando una tarjeta de 67 golpes que le supuso la tercera posición del torneo tras los australianos Chalmers, que le aventajó en dos golpes, y el también australiano John Senden que hizo uno menos en el cómputo total.