Tiene sus ventajas y no está exento de dificultades, pero dirigir uno de los más completos e importantes resorts de golf de Europa es sin duda un gran reto. Y ante ese desafío no se arredra, ni mucho menos, Sean Corte-Real, el profesional de la gestión de empresas turísticas que desde hace unos meses maneja las riendas de La Cala Resort.

Este complejo enclavado en el municipio costasoleño de Mijas cuenta con tres campos de golf de 18 hoyos diseñados por el norteamericano Cabell B. Robinson y una academia situada junto al campo de 6 hoyos pares 3. Además tiene un campo de fútbol e instalaciones deportivas según especificaciones técnicas de la FIFA, y es el único resort de golf con circuito running de 8 kilómetros. El hotel dispone de 107 habitaciones, tres restaurantes temáticos y un spa de más de 1.300 metros cuadrados, entre otros servicios e instalaciones.

Sonriente, afable, con un manejo encomiable del idioma español, el portugués Corte Real es un profesional con una prolífica carrera que le ha llevado por diversos continentes. En su haber, figuran más de 18 años dedicado a la gestión y al frente de resorts de golf con gran prestigio internacional. Master de IE por la Business School de Madrid, es un reconocido experto en la dirección de instalaciones de alto nivel y clase mundial, conocimientos que se complementan con una nueva visión de la hotelería y el golf.

Corte Real comenzó su carrera siendo profesional del turismo. No obstante, pasó cuatro años compitiendo como jugador en torneos de alto nivel por toda Europa antes de pasar definitivamente a la gestión hotelera. Su primer puesto de importancia lo tuvo en Vila Sol Spa & Resort de Vilamoura en el Algarve (Portugal). Tras un tiempo, acaba ascendiendo a director de Golf. Corte Real sentó las bases de su futura carrera logrando que el complejo se alzara con numerosos premios.

En la búsqueda de nuevos retos, aterriza en Iguassu Golf Resort en Foz do Iguaçu (Brasil) donde se encarga de impulsar, como gerente de Proyecto y director de Golf, las instalaciones deportivas, en uno de los destinos más emergentes del país. Desde allí, pasa a Las Colinas Golf & Country Club, en Alicante, donde asume el cargo de director de Operaciones en uno de los complejos considerado referente europeo en la práctica del golf.

Así que dirigir La Cala Resort es para él un nuevo aliciente en su exitosa carrera profesional. “He encontrado un producto fantástico”, dice, “con tres fantásticos campos de golf, un hotel muy interesante, un casa club grande, un spa maravilloso, con el que estamos ahora nominados para Mejor Spa de España… Hay muy pocos resorts en Europa y en el mundo con tres campos de golf”.

A la hora de comercializar un resort con tres campos, señala que con ese número de recorridos “se crea un destino de golf propio y eso nos da la posibilidad de hacer paquetes diferentes y originales, y otra ventaja es que en verano (temporada baja de golf en la Costa del Sol) podemos cerrar uno de los campos para hacer mantenimiento y ahorrar en consumo de agua, lo que nos permite mucha flexibilidad, y también es una ventaja a la hora de organizar torneos”.

“Por ejemplo”, prosigue, “ahora en el Campo América estamos cambiando todos los bunkers y aplanando los tees. Otras instalaciones del resort también van a ser objeto de trabajos de renovación, como el lobby del hotel, algunos de los restaurantes, los campos de golf… menús nuevos, chef nuevo, ideas nuevas”.

–¿Qué objetivos se ha marcado al frente de La Cala Resort?

–Es importante siempre llegar al top. Entonces, un resort como éste, con tres campos de golf y su localización en la Costa del Sol, ha de tener como objetivo ser uno de los mejores resorts de golf de Europa, un referente europeo de golf.

–Los tres campos de La Cala registraron en su conjunto el año pasado unas 90.000 salidas. ¿A qué cifra le gustaría llegar en el futuro?

–Lo realmente importante es que los golfistas que nos visitan disfruten, y claro que cuantos más jugadores vengan, mejor, pero también es fundamental mantener un nivel de calidad y servicio para que salgan satisfechos. Hay dos referencias importantes: calidad y número de jugadores, y lo importante es el equilibrio, por lo que no nos hemos fijado una meta o cifra en ese sentido.

–¿Qué nacionalidades predominan entre la clientela de golf de La Cala Resort?

–Como en toda la Costa del Sol, británicos e irlandeses son mayoritarios, con el 50 por ciento más o menos, y luego están los países nórdicos, un mercado muy fuerte para nosotros, Alemania, Francia, que en los dos o tres últimos años ha crecido bastante, al igual que Bélgica…

–¿Le gustaría que creciese más el mercado español?

–Claro, estamos en España y cuanto más podamos hacer por este mercado, mejor. Yo sé que en el pasado los campos de La Cala tenían un poco la fama de ser muy difíciles, pero la verdad es que en los últimos tres o cuatro años, con el trabajo muy bueno de nuestro greenkeeper, hemos abierto mucho las calles y contrarrestado las dificultades que había en el pasado, y la realidad es que ahora son más podríamos decir campos de resort, más amables para el jugador. Nos gustaría que los españoles que conocían anteriormente La Cala vengan de nuevo para que vean que los campos han cambiado realmente bastante.