Tras un exitoso desempeño profesional en distintos campos de golf y en el grupo empresarial Pryconsa, Kostka Horno ‘aterriza’ en el Real Club de Golf Sotogrande para tomar los mandos del que define –con toda la razón– como uno de los mejores clubes de golf de Europa.

Kostka ostenta una sólida formación no sólo práctica sino también teórica. En Estados Unidos estudió Dirección y Gestión de Empresas especializada en campos de golf, y a su regreso a España su primer destino laboral fue en el club navarro Señorío de Zugasti. Tres años después se mudó a Lanzarote para dirigir Costa Teguise Golf.

Un par de años más tarde retornó la Península para fichar por la sociedad Isla Canela. Empezó como director de Golf y después fue sumando otras altas responsabilidades ejecutivas dentro del grupo empresarial onubense: hoteles, puerto deportivo, promoción inmobiliaria, segundo campo de golf… En total fueron quince años en ese destino, hasta que hace unos meses se gesta la oportunidad de incorporarse como director gerente a uno de los clubes de golf más emblemáticos de España, el RCG Sotogrande. 

“Con los niños ya con ciertas edades, creíamos a nivel familiar que era el momento de un cambio y de volver de lleno a mi sector, que es el que yo conozco, en el que he crecido y para el que me he formado”, dice. “Y además”, añade, “sumando a mi conocimiento de golf toda la experiencia que, especialmente durante los últimos ochos años, he adquirido de gestión corporate de una empresa de la importancia de Pryconsa”.

El pasado 1 de julio tomaba oficialmente el relevo de otro gran profesional del sector que ha desarrollado una magnífica labor durante diez años al frente del RCG Sotogrande, Agustín Mazarrasa, quien ahora se encuentra la frente de otro de los más prestigiosos clubes de golf españoles, el Real Club de la Puerta de Hierro en Madrid.

“Todos los que amamos este deporte”, señala Kostka, “conocíamos y conocemos el campo, pero el RCG Sotogrande es mucho más que un campo de golf, es para mí la referencia a nivel nacional”.

El apasionante reto profesional que afronta es un estímulo añadido para él: “No es sólo el campo de 18 hoyos,  sino que la gestión de un club como este abarca muchísimas áreas y no solamente las que atañen directamente al ámbito de los socios”.

En este sentido, explica que “tenemos un trabajo comercial importante de venta de green fees externos, aunque se trate de un número reducido, la gestión de la restauración, que es para mí lo más espectacular a nivel gastronómico en lo que a golf se refiere, con nuestro chef Mikel Landa, un auténtico lujo de la gastronomía”.

“Y luego”, prosigue, “tenemos también los 9 hoyos pares 3 y la espectacular zona de juego corto, que se construyó en 2017 y es un referente para todos los jugadores de alto nivel del Tour Europeo que viven por la zona, que nos reclaman venir a jugar y a entrenar para preparar determinados campeonatos”.

“Además”, continúa Kostka, “tenemos gimnasio, piscinas, pistas de tenis y de pádel, aunque indudablemente las dos patas principales del club son esta joya de campo que tenemos y la restauración, que es impresionante. Se puede decir que el RCG Sotogrande es sin duda uno de los mejores clubes de golf de Europa.

–Sin desmerecer en absoluto los campos para los que ha trabajado con anterioridad, ¿supone el RCG Sotogrande un gran salto cualitativo en su carrera profesional?

-Sin duda. El hecho de renunciar a lo que he renunciado en Isla Canela, a la posición que tenía con Pryconsa, gestionando la dirección general del grupo, explica la importancia que tiene para mí el RCG Sotogrande. Me aporta mucho desde el punto de vista personal y profesional, no hay para mí ningún club más importante y de hecho no me hubiera movido por ningún otro club que no fuese este. Esto es la excelencia en estado puro.

–¿Qué nos puede decir del campo?

–Por lo que yo he visto y sentido al jugarlo y por lo que me trasladan jugadores del más alto nivel (por ejemplo varios de los que disputaron el Estrella Damm N.A. Andalucía Masters en el vecino Valderrama), el campo está entre los mejores de Europa sin lugar a dudas.

La gran inversión que se realizó en 2015 y 2016 volviendo de nuevo al diseño original de Robert Trent Jones Senior de 1964 y además liderada la reforma por su hijo Robert Trent Jones Junior y Fleury y los arquitectos que estuvieron aquí con los bocetos originales nos hicieron volver a disfrutar de una joya del 64. Los que conocíamos el otro campo vemos la magnitud de esta gran reforma, que yo creo que es el punto de inflexión del club. Agustín Mazarrasa lideró el proyecto con la anterior Junta y creo que marcó un antes y un después en Sotogrande. Se reformaron también el campo de 9 hoyos pares 3 y la zona de juego corto, que se llevaron al mismo nivel que el campo grande.

–Después de una reforma tan exhaustiva como la que se llevó entonces a cabo, ¿se planea alguna otra, aunque sea pequeña, a corto plazo?

–Hay un master plan que vamos a seguir desarrollando a nivel de mantenimiento y que ya estamos ejecutando, tenemos que terminar los caminos del campo de golf… Son inversiones importantes que hay que hacer para poner el lazo a la gran reforma.

–La animada vida social es una característica del RCG Sotogrande…

–Tiene esa gran ventaja que yo también buscaba con el cambio. No hubiese aceptado un club estático, sin mucha vida social. Son 2.500 socios, con una temporada de verano que evidente es el apogeo, pero con mucha actividad durante todo el año. Estamos empezando noviembre y esto es el día a día: grupos llegando sin parar, cenas los viernes, los sábados, brunch los domingos… no paramos. Enseguida estamos ya metidos en la época de Navidad y llegan las comidas y cenas de empresas que tienen socios en la zona… En definitiva, la actividad social no para, y esto lo que da vida y longevidad a un club de prestigio como este.