El ya ex caddie de Robert Allenby Mick Middlemo, al que el golfista abroncó y expulsó mediada la primera ronda del Open de Canadá hace días, ha reabierto las hostilidades al afirmar que ahora duda de la versión de su ex jefe relativa a su supuesto secuestro sufrido en Hawai el 19 de enero.

Middlemo afirma que antes del altercado que terminó con su relación laboral había defendido Allenby "a capa y espada" cuando el golfista afirmó que había sido drogado, secuestrado, golpeado y robado.

El veterano caddie afirmó que a raíz de aquel extraño incidente en Hawai dijo en su día a los medios de comunicación la versión que Allenby le había contado, pero ahora sospecha que su el golfista australiano bebió en exceso, se cayó y se lesionó la cara después de haber tomado unas cuantas copas de vino y tragos de tequila en un bar.

"¿Si creo que fue asaltado, golpeado y robado? No, no lo creo. Ésa es la historia que conté porque esa es la historia que él me dijo que contara, porque yo no estaba allí", dijo Middlemo al Daily Telegraph.

"¿Si creo que simplemente se cayó y se golpeó la cabeza? Honestamente, sí… Creo que se cayó y alguien cogió su cartera y se lo pasó muy bien con su tarjeta de crédito".

Sin embargo, Allenby, se aferra a su historia, alegando esta semana que fue golpeado en Hawai, pero agregó que él pudo haber confundido algunos detalles de aquella noche.

Un hombre fue acusado de usar la tarjeta de crédito del golfista, pero la policía no encontró ninguna evidencia de que fuera secuestrado y golpeado.

Middlemo, hablando del incidente en Canadá que acabó a la postre con su despido, recalcó el mal comportamiento de Allemby en los torneos, y no sólo con él: "La forma en que habla a la gente en el campo de golf es alucinante, a los marshalls, a los voluntarios…".