Jason Day, el mejor golfista del mundo en la actualidad según el ranking, se suma a la lista de deportistas de élite que deciden no acudir a la cita olímpica de Río de Janeiro el próximo mes de agosto debido a la amenaza del Zika sobre todo en las embarazadas.

En un comunicado, el australiano anunció que no competirá en los Juegos de Río por "el temor a una posible transmisión del zika y los riesgos potenciales que puede provocar a mi esposa en futuros embarazos y futuros miembros de nuestra familia".

"Siempre he situado a mi familia delante de todo en mi vida. Expertos médicos han confirmado que competir en Río puede conllevar riesgos de salud para mí y mi familia. Ellie, mi esposa, y yo hemos sido bendecidos con dos hijos maravillosos y sanos y nuestro plan es tener más", señaló el número uno del ranking mundial.

"Siempre ha sido un gran objetivo competir en los Juegos para defender a mi país, pero jugar al golf no puede estar por encima de la seguridad de la familia. No quiero asumir ese riesgo", apuntó Day, quien ya informó de su "difícil decisión" al responsable del equipo australiano, Ian Baker Finch, y al del golf australiano, Stephen Pitt.

Pero Day no ha sido el único deportita que cambió su decisión debido al virus. Hace poco menos de una semana otro golfista ilustre, el norirlandés Rory McIlroy, cuarto de la clasificación mundial, anunció también su renuncia a participar en Río por el mismo motivo.

Además, los también golfistas Marc Leishman y Vijay Singh dieron a conocer que que no participarán en los Juegos Olímpicos de Río señalando el zika como la razón principal. Otros jugadores como Adam Scott, Charl Schwartzel y Louis Oosthuizen lo han mencionado como uno entre muchos factores, incluyendo la violencia y la contaminación de aguas.

Famosos de otros deportes han expresado sus dudas sobre si acudirán o no a Río, entre ellos el jugador de baloncesto Pau Gasol, que ha dicho estar valorando “no ir a Río por el Zika”. El pívot español de los Chicago Bulls expresó su deseo de que “los comités y las organizaciones sanitarias internacionales informen de la situación real en Brasil para que los atletas tomen sus decisiones con todas las consecuencias”.

Otra española, la nadadora Mireia Belmonte, expresó su preocupación en una entrevista reciente: “Si el Zika afecta al resto de mi vida, me plantearé ir a Río”. “Estoy al día de lo que pasa, todavía queda tiempo para los Juegos, pero es un tema importante que hay que tratar, hay que estar seguros de que vamos seguros, sin riesgo de contagio”.