
Una nueva temporada de golf ha comenzado hace muy poco y un cierto optimismo parece flotar en el ambiente, eso si, mezclado con una rara sensación de añoranza de tiempos mejores. La nostalgia en este caso no es buena. Los datos de ocupación de los campos en los últimos meses no han sido malos, en todo caso algo mejores que en años anteriores. Especialmente el verano fue bastante positivo para casi todos. Las previsiones inmediatas tampoco pintan mal del todo, o al menos no pintaban en el momento de editar esta revista.
No es que estemos en pleno proceso de recuperación, entendiendo esta como una vuelta a la euforia de los primeros años de este siglo, pero al menos parece que comienza a invertirse la tendencia, que dejamos de caer para comenzar, aunque sea tímidamente, a subir. Volver a las cifras de ocupación de hace cuatro o cinco años va costar. Son muchos los factores en juego -en algunos de ellos no podemos influir- por lo que es mejor no proponerse como objetivo inmediato aquellas cuotas porque podemos caer en la frustración. Tenemos mucho a nuestro favor: ubicación (a poco menos de dos horas y media de cualquier ciudad europea), clima, calidad, servicio (mejorable), muchas ideas y un sector dinámico y altamente profesionalizado que es garantía de éxito en cuanto el panorama comience a despejarse.
No abandonar nunca la promoción, no entender esta como un gasto si no como una inversión, es esencial para que nuestro destino esté siempre en la mente de los aficionados al golf de todo el mundo. Los recortes drásticos en esto nos puede llevar a la catástrofe cuando hay tantas zonas esperando nuestro traspiés.
Por esto es muy positivo que se celebren en Andalucía grandes torneos de golf. Acabamos el verano con el Open de España Femenino, jugado en La Quinta a mediados de septiembre, continuamos con el Benahavís Seniors Masters, también en La Quinta; y acabamos el mes de octubre con la vuelta a Valderrama de la alta competición: el Andalucía Masters, un evento que atrae a los mejores jugadores del Viejo Continente. Y aunque no esté en nuestras manos acabar con la crisis dichosa, si es mucho lo que podemos hacer para que vuelvan los aficionados al golf. Nosotros, Andalucía Golf, como primer órgano de comunicación del golf andaluz, estamos dispuestos a emplearnos a fondo para que el futuro inmediato sea mucho mejor.
Deja una respuesta