Que a muchos jugadores les gusta apostar en el campo de golf no es noticia, pero la cosa cambia si el protagonista es nada menos que Phil Mickelson y encima trasciende cuánto dinero había en juego.

Nada hubiese ocurrido si el joven Ryan Ruffels, de 17 años y nacido en Orlando, no hubiese desvelado su trato con el famoso jugador zurdo norteamericano.

Todo comenzó cuando Ruffels, que se crió desde los 11 años en Australia, relató a un periódico de Sidney que en en una ronda previa al Farmers Insurance Open aceptó una apuesta que le propuso Mickelson. “Estábamos en el primer tee, era muy temprano por la mañana, y me dijo: ‘No me levanto tan temprano para jugar por menos de 2.500 dólares’.

El ganador de 42 torneos del Circuito Americano ofrecía pagar 2 a 1 a su rival si éste le ganaba. Si vencía Mickelson, Ruffels le pagaría 2.500 dólares, y si sucedía lo contrario el joven jugador recibiría 5.000 dólares del campeón estadounidense.

Ruffels tuvo una ronda con un final extraordinario en el que embocó birdie en seis de los últimos siete hoyos y se impuso por un golpe a Mickelson, que tuvo que pagarle lo acordado.

A Mickelson, ganador de cinco grandes, no le gustó nada que su joven rival hiciera pública la apuesta a través del periódico y dijo que la historia había sido extremadamente exagerada y que la cifra de 5.000 dólares era inexacta.

"Es joven y tiene algunas cosas que aprender. Una de ellas es no hablar de ciertas cosas, no desvelar detalles. Y desde luego no alardear de una cantidad falsa sólo para hacerse publicidad. Ya no está en el instituto, y va a tener que dejar de hacer eso ahora que está en el PGA Tour".