Stewart Cink, ganador del Open Británico de 2009, ya puede alardear de otro hito en su carrera: haber embocado un put de ¡31 metros! Claro que la cosa tiene truco, porque el golfista norteamericano no lo hizo en un campo de golf, y ni siquiera con luz solar. Ocurrió por la noche en una cancha de baloncesto.

El show, que de eso se trataba al fin y al cabo, tenía un fin filantrópico: ayudar a conseguir 25.000 dólares para un estudiante de la Georgia Tech.

El ganador de seis torneos en el Circuito Americano celebró su gran golpe en la cancha como si estuviera reviviendo su triunfo en el Open Británico. Luego Cink escribiría lo siguiente en twitter junto a una foto de la bola con la que dio el gran golpe: “Voy a usar esta bola toda mi vida: ¡la he embocado desde 94 pies!