
Scheffler aguanta la remontada de Rahm y gana su tercer grande
En deporte todo puede cambiar en cuestión de minutos, y eso es lo que le sucedió a Jon Rahm en el tramo final del PGA Championship, segundo Grande de la temporada y escenario escogido por el vasco para volver a mostrar su mejor versión. Avanzada la jornada final, Rahm tuvo opciones muy reales de convertirse en el primer español en ganar este torneo, pero tres hoyos finales para olvidar acabaron relegándole a la octava plaza en Quail Hollow Club (Charlotte).
Cinco golpes separaban al español de la cabeza en el tee del 1, una diferencia considerable, más aún teniendo en cuenta que el poseedor del liderato era Scottie Scheffler. Sin embargo, este trecho se fue acortando a medida que Rahm iba firmando birdies -hasta el hoyo 15 acumulaba tres sin fallo alguno- y el estadounidense se atascaba con tres bogeys.
La mitad de la ronda de Scheffler y Rahm, pura tensión
Ambos llegaron a compartir liderato en esa parte intermedia de la ronda. Pero todo se torció a partir del 16, resuelto por Rahm con un bogey. En el 17 el español tomó los riesgos lógicos de la situación y se fue al agua; fue el primero de los dos doble bogeys con los que cerró una semana que, pese a ese doloroso final, debe dejarle una buena lección: sigue siendo competitivo entre los mejores.
Ese final de Rahm aclaró, y de qué forma, el camino de Scottie Scheffler hacia un nuevo triunfo en un ‘major’. A la vista de los números, su victoria es absolutamente incontestable: ha ganado con cinco golpes de ventaja sobre los segundos clasificados, Bryson DeChambeau, Harris English y Davis Riley.
Otra guerra era la de David Puig (+6) y Sergio García (+7), los otros dos españoles que han jugado el fin de semana y que han concluido lejos de las primeras posiciones en Quail Hollow. Cabe recordar que Eugenio López-Chacarra (+4) se despidió del torneo el viernes al no superar el corte.
Rahm, su esfuerzo contra Scheffler y su jornada
Un 67 impulsó a Rahm en la tercera jornada Jon Rahm necesitaba dar un golpe sobre la mesa en la tercera jornada del PGA Championship y lo dio con fuerza y contundencia. El vasco invirtió el sábado 67 golpes y se aupó a la quinta plaza provisional con -6.
La tercera manga en el exclusivo campo de Quail Hollow se desarrolló entre un persistente viento que complicó el juego de los golfistas. No tanto el de Jon Rahm, que estuvo firme con el putt y, sobre todo, con los hierros. Sólo una escapada en el hoyo 11 le metió en apuros. Siete birdies le metieron de lleno en la lucha por la victoria.
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